Los dos testigos de Dios

LOS DOS TESTIGOS.

Una de las grandes incógnitas por saber, es quiénes serán estos dos testigos que serán los encargados de desenmascarar al anticristo y su falso profeta, será una batalla tremenda entre el bien y el mal.

APOCALIPSIS:11-3 “Y otorgaré autoridad a mis dos testigos, y ellos profetizarán por mil doscientos sesenta días, vestidos de cilicio”. Es decir que durante tres años y medio los dos enviados de Dios predicarán y harán señales en los cielos para que la gente crea y no se ponga el sello de la bestia.

Estos dos testigos son quiénes comandarán a los 144mil judíos, que será el ejército de Dios en la tierra durante la gran tribulación, nadie más tendrá autoridad sobre la tierra para predicar el la palabra de Dios. Vestidos de cilicio quiere decir que vestirán con un rabino ortodoxo judío.

APOCALIPSIS:11-4 “Estos son los dos olivos y los dos candelabros que están delante del Señor de la tierra”.

ZACARÍAS:4-2,3y4 “Y me dijo: ¿Qué ves? Y respondí: He aquí, veo un candelabro todo de oro con su depósito en la parte superior, y sus siete lámparas encima de él con siete tubos para cada una de las lámparas que tiene encima, y junto a él hay dos olivos, uno a la derecha del depósito y el otro a la izquierda.”

Estos dos versículos hacen referencia al escudo de Israel que hoy día es este. Los dos olivos son los dos testigos que cubren la unción y protegerán al candelabro que es el símbolo judío ya que este se utilizaba en el tabernáculo de Jehová en la era de Moisés, el fuego de este candelabro significa la presencia de Dios, la presencia de su Santo Espíritu, pero lo que Dios nos quiere decir es que en aquella época de tribulación no se irá de la tierra el Espíritu Santo, ni se olvidará de ella y mandará a estos dos profetas para su protección, por eso los compara con los dos olivos.

ZACARÍAS:4-4y5 “Continué, y dije al ángel que hablaba conmigo: ¿Qué es esto señor mío? Respondió el ángel que hablaba conmigo, y me dijo: ¿No sabes qué es esto? Y respondí: No, señor mío.”

ZACARÍAS:4-6 “Entonces respondió y me habló, diciendo: Ésta es palabra de Jehová a Zorobabel, que dice: No con ejército, ni con fuerza, sino con mi Espíritu, dice Jehová de los ejércitos”. Otra vez el Santo Espíritu de Dios! Está claro, en la gran tribulación estos dos testigos serán ungidos por el poder del Espíritu Santo, será un ejército de 144mil soldados comandados por dos profetas que estarán cubiertos por la unción del Espíritu Santo.

APOCALIPSIS:11-5 “Y si alguno quisiere dañarles, sale fuego de la boca de ellos, y devora a sus enemigos; y si alguno quisiere hacerles daño, debe morir él de la misma manera”. Poder sobrenatural! Unción del Espíritu Santo! Será terrible su fuerza contra todos aquellos que se unan al anticristo y morirá todo aquel que quiera hacerles daño.

Es cierto que Juan en su visión no da nombres al respecto, pero si prestamos mucha atención a las señales y prodigios que harán, podemos ver que el verso dice “..y si alguno quisiere hacerles daño, debe morir él de la misma manera”, esto me suena mucho a “ojo por ojo y diente por diente”, una pista clara de las sagradas escrituras.

APOCALIPSIS:11-6 “Estos tienen poder para cerrar el cielo a fin de que no llueva durante los días en que ellos profeticen; y tienen poder sobre las aguas para convertirlas en sangre, y para herir la tierra con toda suerte de plagas todas las veces que quieran”. Más detalles de sus señales y prodigios, pues vemos que cerrarán el cielo, este milagro ya sucedió en el antiguo testamento, fue Elías, uno de los profetas más impresionantes que hubo, fue tal el poder que Dios le transmitía, que cerró y abrió el cielo para la gloria de Jehová.

Les recuerdo que Elías no murió, porque fue tomado/arrebatado por el Señor en cuerpo y alma, y fue un profeta muy confrontador con todo aquel que no creía en el poder de Jehová, me late que Elías tiene el perfil perfecto para darle guerra al anticristo y su pandilla.

“..y tienen poder sobre las aguas para convertirlas en sangre, y para herir la tierra con toda suerte de plagas todas las veces que quieran”, otra señal que ya sucedió en el antiguo testamento, Moisés trajo sobre Egipto toda clase de plagas, y sin duda este ungido de Dios fue otro de los mayores guerreros de Jehová de los ejércitos.

APOCALIPSIS:11-7 “Cuando hayan terminado de dar su testimonio, la bestia que sube del abismo hará guerra contra ellos, los vencerá y los matará”. Finalmente tendrán que morir, igual que los 144mil, igual que todos aquellos que no se sellen con el 666, es esta la única forma de escapar del lago de fuegos, y es esta su misión, evitar que te selles, o que te implanten el microchip para ser condenado por la eternidad, dice la Biblia que muchos se salvarán gracias a estos héroes, los dos testigos y los 144mil.

Pero nadie escapará de las garras del anticristo, si te quedaste para el segundo vuelo, ten por seguro que serás decapitado, ni los dos testigos se librarán de esto, ni los 144mil que llevarán el sello de Dios en la frente, imagínate tú que serás un simple terrenal más lo que te puede pasar, arrepiéntete y no esperes a quedarte siete años de vacaciones en la tierra con el anticristo.

APOCALIPSIS:11-8 “Y sus cadáveres yacerán en la calle de la gran ciudad, que simbólicamente se llama Sodoma y Egipto, donde también su Señor fue crucificado”.

Es decir, en el mismo monte de la crucifixión de Cristo, que en aquel tiempo será como Sodoma, esta antigua ciudad fue destruida por Jehová debido a la corrupción sexual de esta, y porque si fue Jerusalén dónde murió Cristo, aquí Juan en su visión la llama Sodoma, pero hace un matiz y dice “simbólicamente” o sea que Jerusalén se convertirá en una especie de Sodoma, hoy mismo Israel ya es uno de los países dónde más homosexuales hay en el mundo, y el primero en medio oriente. “escrito está”

Vemos el porque de la comparación con Sodoma, pero y porque también la compara con Egipto, pues fue allí dónde la nación de Israel padeció antes de que fuera rescatada por Moisés en los cuarenta años del desierto en el libro de “éxodo”.

APOCALIPSIS:11-9 “Y gente de todos los pueblos, tribus, lenguas y naciones, contemplarán sus cadáveres por tres días y medio, y no permitirán que sus cadáveres sean sepultados”. Resulta que nuestros amigos judíos no velan a sus fallecidos, es decir que ellos entierran a sus seres queridos el mismo día de su muerte, lo que quiere decir que esto será gran ofensa según el anticristo, pero no sabe que estos acabarán resucitando para preparar la guerra del armagedon en el día de la ira de Jehová.

APOCALIPSIS:11-10 “Y los que moran en la tierra se regocijarán por ellos y se alegrarán, y se enviarán regalos unos a otros, porque estos dos profetas atormentaron a los que moran en la tierra”. Aquí habla de los seguidores del anticristo, que serán todos aquellos que acepten ponerse el microchip del 666 y harán una gran fiesta en el día que estos dos testigos mueran. Pero ahora viene lo bueno!!

APOCALIPSIS:11-11 “Pero después de los tres días y medio, el aliento de vida de parte de Dios vino a ellos y se pusieron en pie, y gran temor cayó sobre quienes los contemplaban”. Este es otra muestra de que el Espíritu de Dios seguirá sobre la tierra mientras esté gobernando el anticristo, ahora imagínese la cara de esos locos que se sellaron cuándo comprueben que estos dos resucitan y se van al cielo en una nube.

APOCALIPSIS:11-12 “Entonces oyeron una gran voz del cielo que les decía: Subid acá. Y subieron al cielo en la nube, y sus enemigos los vieron”.

APOCALIPSIS:11-13 “En aquella misma hora hubo un gran terremoto y la décima parte de la ciudad se derrumbó, y siete mil personas murieron en el terremoto, y los demás, aterrorizados, dieron gloria al Dios del cielo”.

Sin duda alguna estos dos testigos son ELÍAS Y MOISÉS.

El Señor está a punto de venir porque ya todas las señales están cumplidas, no te quedes a verlo en vivo y en directo, pues te será mejor no haber nacido!, arrepiéntete de tus pecados y acepta a Jesucristo como tú salvador, quizá no asistas a una iglesia, pero en tu casa, en tu habitación, arrodíllate y pídele perdón a Dios por tus pecados, y recuerda siempre, que en el infierno nadie es ateo.